La empresa aplica la compensación y absorción porque no quiere atar su política retributiva a las subidas que establece el Convenio Colectivo anualmente para el Salario Base y el Plus Convenio y trienalmente para la antigüedad.
Así que lo fía todo a una evaluación del desempeño que no es una valoración objetiva del trabajo de cada persona, sino una puntuación comparativa, subjetiva y opaca que acaba situando a cada trabajador en una campana de Gauss forzada.
Si estás en un equipo de 50 profesionales extraordinarios, que objetivamente tendrían puntuaciones de 8 y 9 sobre 10, la dichosa campana obliga a colocar a 25 de ellos con puntuaciones por debajo del 5, 10 en el 6 y los otros 15 por encima del 7, de modo que el 80% del grupo va a estar ubicado en una puntuación muy inferior a la que se merecen.
Por eso hay que compensar de alguna manera esta arbitrariedad en los aumentos salariales y pedimos el apoyo de toda la plantilla:
- Firmando presencialmente en las oficinas de Madrid (sala P1-01), Oviedo, Murcia, Alicante y Monzón
- Adhiriéndote en el formulario online:
Tienes hasta mañana viernes para colaborar y hacer ver a la empresa que la política salarial es la principal preocupación de los trabajadores.
Vais a hacer algo útil o solo recoger firmas para que parezca que haceis algo?
ResponderEliminarEvaluación de desempeño? Aquí hacen esto? Tengo años y nadie me ha hecho nunca una evaluación de desempeño!!!
ResponderEliminarA mi me la hacen 2 veces al año y el responsable siempre nos dice que eso solo es para justificar tu trabajo, que nunca se va a traducir en una mejora salarial
Eliminarding dong, suenan las campanas y otro año sin que el sindicato haga algo que realmente útil que quede reflejado en los euros que me ingresa la empresa.
ResponderEliminarMe pregunto muy en serio que secreto "oscuro" se esconde detrás de esa pasividad.
Y tienen el descaro de exigir que te afilies, yo debo hacer magia para llegar a final de mes y estos cómodos reciben otra paguita extra
EliminarOtro año en el que el sindicato se queda en palabras y no en hechos. ¿De qué sirve tanta representación si no se traduce en euros en la nómina? Esa pasividad no es casualidad, y la pregunta es legítima: ¿qué intereses se esconden detrás? Porque mientras los trabajadores esperan mejoras reales, parece que alguien está más cómodo manteniendo el silencio que defendiendo lo que importa.
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